La batalla de Inglaterra fue uno de los mayores combates que se ha dado en la historia, con la particularidad de ser el único que se disputo en su totalidad en el cielo, prácticamente toda la batalla se disputo sobre cielo británico, y en ella los pilotos ingleses defendieron con todo lo que pudieron la preservación de Inglaterra, en muchos casos dejando su vida como héroes en nombre de su patria.
En aquel momento el primer ministro británico era el recordado Winston Churchill, el cual no quiso rendirse ante la presión de los alemanes, lo que generó que toda la Luftwaffe comandada por Hermann Göring, segundo hombre del III Reich, intentará destruir puntos estratégicos para debilitar lo que más se pudiera sobre todo a la flota naval británica conocida como Royal Navy, y considerada una de las flotas más poderosas incluso en la actualidad.
El plan fracasó por la sagacidad de los pilotos ingleses que defendieron durante meses el hostigamiento Nazi, a finales de mayo de 1941 los ataque cesaron, y en ese momento Inglaterra se dio cuenta que había podido vencer a los alemanes, lo cuales no había podido destruir ni su flota naval ni las fábricas que construían sus aviones de guerra, por lo que este se puede considerar como un punto de inflexión para la segunda guerra mundial y la caída de Hitler.
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