Enrique Octavo de Inglaterra es uno de los reyes más recordados en la historia de la humanidad ya que producto de sus amores es que nació la Iglesia de Inglaterra, entre otros cambios que sucedieron durante su reinado, pero en la memoria de la historia siempre estará la historia de Ana Bolena.
Ana Bolena fue la segunda esposa de Enrique VIII, la llegada de ella a la corte se dio en un momento donde la primera esposa del rey no había podido darle un hijo varón que no muriera joven, por lo que había una gran preocupación por la sucesión del trono de Inglaterra.
La primera intención del rey fue volverla una de sus amantes, pero la respuesta que obtuvo el rey fue: “suplico a su alteza muy seriamente que desista, y a esta mi respuesta en buena parte. Prefiero perder la vida que la honestidad.”
Tras muchos intentos el rey decide intentar anular su matrimonio con Catalina de Aragón en 1527 ante la Santa Sede, mientras tanto en la corte Ana Bolena se hacía cada vez más conocida y tomaba mas facultades y su vida se llenaba mas de lujos producto de la bendición real.
La Santa Sede anulo la aprobación del matrimonio del rey, pero después de muchos intentos logró el apoyo de los reyes de Francia, posterior a este apoyo se casaron a escondidas, y en pocos meses Ana Bolena quedó embarazada.
Después de mucho intentos Ana Bolena solo le pudo dar e Enrique VIII una hija y de a poco fue perdiendo la bendición real, después de varios intentos frustrados el rey cada vez perdió mas su cariño, después de muchas idas y vueltas fue acusada de adulterio, incesto y alta traición y ejecutada sin piedad.
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